Treinta de junio, cinco de la tarde, 33 gradazos sobre el asfalto parisien y pistoletazo de salida a los soldes d'été. Reconozco que nunca he sido amiga íntima de las rebajas (y menos en verano). Me parece el periodo del año más tortuoso e improductivo para comprar trapos. Puede ser que mi aversión venga de mi carencia casi total de esa cualidad que algunas deberían incluir en sus CV ("ojo de lince en la caza del chollo" o también conocidas como "marichollos"), o
que mi paciencia no pasa las pruebas dejueves, 1 de julio de 2010
miércoles, 23 de junio de 2010
Un pedacito (muy grande) de Oriente en París
Puede que muchos de vosotros lo sepáis ya, o que incluso lo conozcáis de sobra, pero para mí ha sido todo un descubrimiento. Se trata del 13e arrondissement (distrito 13 de París), donde se esconde La petite Asia, un barrio oriental donde se concentran comercios, restaurantes y la mayor parte de habitantes asiáticos de la capital francesa. A medida que tus pasos se adentran en la Avenue de Choisy, en paisaje empieza a cambiar. Las personas con las que te cruzas, las que están sentadas en sus bancos y terrazas o las que salen de tiendas y portales pertenecen en su gran mayoría al lejano oriente. Los letreros y carteles están escritos en alfabeto chino. Bazares, restaurantes,
miércoles, 9 de junio de 2010
Carpe diem quam minimum credula postero...
Es cierto, París nunca estuvo en la lista, ni en ningún plan. Pero, ¿quién puede prever lo que mañana pasará? El instante corre rápido, cada vez más, y el carpe diem que Horacio cantaba, cada minuto se vuelve más real, más lógico. La vida es un regalo único e intransferible que no pienso dejar a la deriva escuchando el tímido tic tac aterrador que nos acompañará hasta el fin.
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